jueves, 26 de julio de 2007

Be yellow, my friend

Si padezí las picaduras de la araña más emo y el ¿final? del piratas más pirata de los 69 mares, ¿cómo iba yo a perderme el único acontecimiento que levantaba una mínima expectación en mí?(aparte de la llegada de los Beckham a Hollywood, por supuesto).

Hace ya algún tiempo que no veo Los Simpson, por que tengo los capítulos más vistos que el Miki Nadal, pero no por ello les he perdido el cariño. Esta tarde me acerqué al cine a videar la película de la familia americana más conocida y querioda por encima de los Kennedy.

La verdad es que iba con cierto temor puesto que era muy fácil cagarla. Veinte años son muchos años y muchos capítulos y muchos gags y muchas bromas y mucho de todo como para que nos pueda sorprender algo. Pero nuestro amigo Matt ha demostrado ser un cabronazo muy listo. Ha hilado muy fino creando un producto con entidad propia, no un capítulo estirado. Juegan con las referencias clásicas desde los estrangulamientos de Bart por parte de Homer, hasta el alcoholismo de Barney, pasando por la imbecilidad del agente Wiggun (y de su hijo, personaje predilecto de Matt Groening y de muchos fans, entre los que me encuentro). Pero han sabido introducir nuevos elementos que enriquecerán sin duda la serie, insuflando nueva vida a estos personajes de sobra conocidos.

La trama es sencilla y muy actual: un desastre ecológico pondrá en peligro la vida y el matrimonio de los Simpson, asi como de todo Springfield. Simple pero, como un truco de magia, la cosa se va complicando hasta acabar en algo enorme. No os espereis una obra maestra de la comedia, pero si algo que hos hará pasar un buen rato por que hay un par de momentos antológicos que pasarán de recuerdos a vivencias sobre los Simpson como cualquier aparición de Ralph Wiggun, el corto de hombre golpeado por balón de fútbol del Señor Topo o frases como "No le ofrezca cacagüetes a mi dios" de Apu a Homer.

Los amantes de esta familia tan irrealmente verídica podemos congratularnos de que se haya respetado todo y por todos: los creadores han respetado su producto explotando, sin abusar, lo que el público quería ver y ofreciendo cosas nuevas que no chocan con lo establecido; a los dobladores por seguir haciendo su trabajo tan bien, sin cambios ni historis como pasara con la película de South Park.

Si la veis, quedaros hasta el final de los títulos de créditos por que introducen algunos detalles simpáticos.

P.D.: no comento nada de lo de El Jueves por que es una estupidez. Espero que desaparezca de una vez la Monarquía, que ya hay muchos chupando del bote como aún por encima mantenerles el tinglado. Si no, que repartan, que su casa la pago yo y todos los demás españoles, ¿no tendríamos derecho a gozar de ella? ¿No se podía establecer un sorto para disfrutar de las posesiones de la Casa Real cuando estas están desocupadas? Yo me pido primer para el palacio de Mallorca y sino que me dejen el yate, que ya me apañaré.

Un pequeño inciso (28-Julio): para los que dicen que los chistes de la película de los Simpson son simples y que han perdido la gracia les recomiendo leer este magnífico post de Hernán Casciari sobre el cambio que se produjo en nosotros los espectadores tras convivir 20 años con los Simpsons

2 comentarios:

noa dijo...

Como se nota que no pagaste tú ninguna de las entradas para las pelis si no seguro que no ibas ni a la mitad ;)
Como la vi contigo no tengo mucho que comentar, además el hecho de crecer contigo hace que mis gustos se hayan ido modelando según los tuyos (por cierto he puesto a bajar sin city), a ver cual será el próximo estreno para ver porque aún queda una entrada.
Besos

poliptoton dijo...

A ver, por partes, y sin todavía, por motivos ajenos a mi voluntad, haber podido ver la peli. Lo que dice el blog es cierto, peeero siguiendo su ejemplo, si Poe viviera hoy en día no seguiría escribiendo lo mismo, porque habría otros que lo harían mejor y, sobre todo, venderían mucho más. Supongo que leíste la noticia del tipo que envió "Orgullo y Prejuicio" con el título cambiado a varias editoriales y se la rechazaron. Pues eso no demuestra nada, aparte de que los correctores no han leído mucho: cada época tiene sus símbolos, sus temas y sus manifestaciones artísticas. ¿Que nosotros hemos cambiado? Perfecto, pues entonces, ¿qué sentido tiene seguir haciendo nuevos episodios? Porque además, los antiguos me siguen pareciendo cojonudos...
Y por otra parte, quien diga que desde la temporada 10 (aprox) hasta la actualidad el bajón de calidad no es brutal es que o es ciego o no quiere ver. Y creo que por un motivo por encima de todos: los personajes ya no actúan como ellos mismos. Ya se han hecho tantas cosas y tantos argumentos que hay que llevar las cosas al extremo y buscar argumentos al límite. Pero claro, yo quiero a los personajes que conozco, y la Marge que yo conozco no se pondría tetas y el Homer que yo conozco no se iría a vivir con unos gays.
Una retirada a tiempo es una victoria. Cuando "Los Simpson" decayeron, Groening creó "Futurama": ¿por qué no seguir por ahí, por ejemplo?
Perdón por el rollo.